Noventa y tres
(Quatrevingt-Treize)
Victor Hugo
Gredos
Colección Biblioteca Universal Gredos
2004
Traducción de Alain Verjat Massmann
Tapa dura
479 páginas
Introducción y notas de Alain Verjat Massmann
Impreso en Madrid (España)
✶ ESTADO: 9/10. Excelente estado
Desgastes mínimos en tapa y contratapa
Mezclando la ficción con la realidad histórica, Hugo narra el enfrentamiento de tres hombres: el aristócrata Lantenac, príncipe bretón fiel a la casa real y jefe del ejército insurrecto de la Vendée; su sobrino Gauvain, convertido en jefe militar del ejército republicano; y el sacerdote Cimourdain, devoto revolucionario, enviado por Danton, Marat y Robespierre al frente de batalla como comisario político de la Convención. El libro transcurre durante la revolución Francesa, uno de los períodos más intensos de la historia.
✶ SINOPSIS:
En Noventa y tres, epopeya de la Revolución francesa, los tres protagonistas traducen personalidades éticas superiores: el marqués Lantenac es el viejo austero noble francés que siente profundamente y sostiene todas las responsabilidades de una antigua clase dirigente; Cimourdain, el representante de un pueblo que quiere elevarse a propia dignidad de vida animado por el rígido estoicismo de los delegados de la Convención; Gauvain, sobrino del primero e hijo adoptivo, del segundo, es el noble pasado a la causa popular, personificación de un generoso esfuerzo de renovación. Existe entre ellos una inteligencia profunda y, sin embargo, impotente; su comprensión es imposible.
Protagonista de Cimourdain. Lantenac tiene en común con éste los caracteres constitutivos: es el puntal de la monarquía, como aquél es apóstol de la revolución, pero uno y otro viven únicamente para respetar y hacer respetar unos principios. y ni uno ni otro reparan en los absurdos que puedan derivar de ese respeto. En el contraste entre ambos dogmatismos, la lucha entre una opción que nace y una tradición que muere está considerada en aquel momento de crisis que el nacimiento tiene en común con la muerte; unos y otros vence obligados a buscar su fuerza en la intransigencia de una ideología aceptada a ultranza; uno y otros saldrán derrotados en su empresa, y en uno y en otro sufrirá impotente con su eterna fe, una humanidad que rebasa todos los esquemas.
Victor Hugo (1802-1885)