✴ envíos gratis a Argentina a partir de $80.000 ✴ envíos a toda Argentina y el mundo ✴ ✴ envíos gratis a Argentina a partir de $80.000 ✴ envíos a toda Argentina y el mundo ✴ ✴ envíos gratis a Argentina a partir de $80.000 ✴ envíos a toda Argentina y el mundo ✴ ✴ envíos gratis a Argentina a partir de $80.000 ✴ envíos a toda Argentina y el mundo ✴ ✴ envíos gratis a Argentina a partir de $80.000 ✴ envíos a toda Argentina y el mundo ✴ ✴ envíos gratis a Argentina a partir de $80.000 ✴ envíos a toda Argentina y el mundo ✴ ✴ envíos gratis a Argentina a partir de $80.000 ✴ envíos a toda Argentina y el mundo ✴ ✴ envíos gratis a Argentina a partir de $80.000 ✴ envíos a toda Argentina y el mundo ✴ ✴ envíos gratis a Argentina a partir de $80.000 ✴ envíos a toda Argentina y el mundo ✴ ✴ envíos gratis a Argentina a partir de $80.000 ✴ envíos a toda Argentina y el mundo ✴ ✴ envíos gratis a Argentina a partir de $80.000 ✴ envíos a toda Argentina y el mundo ✴ ✴ envíos gratis a Argentina a partir de $80.000 ✴ envíos a toda Argentina y el mundo ✴ ✴ envíos gratis a Argentina a partir de $80.000 ✴ envíos a toda Argentina y el mundo ✴ ✴ envíos gratis a Argentina a partir de $80.000 ✴ envíos a toda Argentina y el mundo ✴ ✴ envíos gratis a Argentina a partir de $80.000 ✴ envíos a toda Argentina y el mundo ✴ ✴ envíos gratis a Argentina a partir de $80.000 ✴ envíos a toda Argentina y el mundo ✴
€13,69
Precio sin impuestos €11,31
10% de descuento pagando con Transferencia
Ver más detalles
1 en stock
Entregas para el CP:
Medios de envío
Calcular
No sé mi código postal

Poemas del bajo fondo (Viento que lleva y trae)

Enrique Cadicamo

Editorial Peña Lillo

Colección La Siringa

1964 - 11 ed

Tapa blanda, rústica sin solapas

133 páginas

Impreso en Buenos Aires (Argentina)

 

✶ ESTADO: 9/10. Muy buen estado

Desgastes mínimos

 

✶ SINOPSIS:

La literatura popular tiene pocos exponentes en la Argentina. Podríamos citar a Yunque, Arlt, Gálvez. El resto de nuestros escritores son estudiosos cuya formación universitaria les facilita la simulación de la literatura popular. Muchos de sus libros están destinados a que lo lean otros escritores, pero pocas veces o ninguna por sus verdaderos destinatarios, reduciéndose este juego a una labor sólo para intelectuales, habiéndose creado ya una literatura lunfarda para lectores cultos, hasta convertir la incursión en la zona del desprecio, en un atrevimiento mental, o una exótica aventura como la del inglés cuando se interna en la jungla, pero jamás en una expresión auténtica y sentida, Quiérase o no, fueron las letras de tango las que mejor interpretaron el sentir ciudadano. A través de ellas se puede, incluso, reconstruir los ciclos históricos del porteño; la belle epoque y la década infame el porteño la ubicará entre el tango “Tiempos Viejos” y “Al Mundo le falta un tornillo” que es como decir, de la vida simple y desaprensiva, a la crisis total, del año 30, de todos los valores: éticos y pecuniarios. Incrustado en esa época tanguera está Enrique Cadícamo. La sola enumeración de algunas de sus creaciones como ser: “Che papusa oí”, “La Casita de mis viejos”, “Pompas de Jabón”, “Comypadrón”, "Muñeca Brava", “Anclao en Paris”, “Nostalgias”, “Por la vuelta”, dan la medida de su arraigo popular habiendo sido uno de Jos autores más cantado por el mítico Gardel. Su verso simple de muchacho andariego, infatigable husmeador del mundo de extramuros, no sólo se hizo música en la garganta del cantor, sino que compuso una crónica poemática recordando el Buenos Aires de comienzo de siglo: “Poemas del Bajo Fondo”, “Viento que lleva y trae”. Personas, lugares, hechos que hoy sólo viven en el recuerdo de muy poca gente, Cadicamo los rescata para siempre convirtiéndolos en un valioso y auténtico testimonio de la época para quienes necesitan informarse, quieran construir o tan solo recordar.

 

✶ EXTRA: El farol colorado, incluído en esta edición

 

Hubo hace muchos años en la Isla Maciel

un turbio atracadero de la gente nochera;

ahí bajaba del bote la runfla calavera

a colocar su linea y a tirar su espinel.

 

Se llamaba ese puerto El Farol Colorado

y en su atmósfera insana, en su lodo y su intriga,

floreció la taquera de la lata en la liga,

de camisa de seda y de seno tatuado.

 

Al entrar se dejaba todo en el guardarropa:

revólveres, taleros y los cabos de plata;

la encargada del mismo, una gorda mulata

estibaba sus grasas en la proa y la popa.

 

En el salón sonaba la pianola ruidosa,

el cine pornográfico caldeaba aquel ambiente

y cuando el intervalo, los vasos de aguardiente

continuaban aquella velada indecorosa.

 

Cuando en alguna pieza se oía la jarana

de la mujer que a veces no se mostraba activa,

una frase en polaco, de la regente iba

como un chirlo en la nalga de la mina haragana.

 

El pecado, la riña, el vicio, la bebida,

el rencor, el delito, la lujuria, el recelo,

eran las flores negras que brotaban del suelo

de esa isla del diablo y de la mala vida.

 

y ya, lector, que sabes el soplo que ha inspirado

estos temas del hampa con los que siempre vibro,

si no te asfixia el clima que respira este libro

puedes leerlo a la luz del Farol Colorado.